Cuánta emoción la de ayer, por jornadas como esas hay que seguir creyendo en el fútbol, en las que un hincha de Huracán vestido de Boca salva a su equipo del descenso directo gracias a un cabezazo de Palermo, que se retira contra Gimnasia. In your face. Y River dependiendo en otra cancha de un arquero que jugaba su primer partido de la temporada. Atajó todo y salvó a su equipo. Hijo de puta. Ese sí que tiene algo para contar. A mi lo más emocionante que me pasó en el último tiempo fue que Latorre me contestó un twitt.
El momento de River, de tan obvio, no lo puedo creer. Esto le pasa por temeroso, por mendigar empates, jugar con ocho defensores, por inflar a Carrizo (que se hizo dos goles en dos clásicos), por dejar a Lamela solo, que tiene 18 años y se la bancó bastante. Esperaba más de Pavone, no entiendo como jugó tanto Lanzini, se lesionó Acevedo y la pelota no corrió más. ¡Acevedo! Volvé, Maisterra.
En esta fecha quedó claro que todo puede pasar. ¿O acaso se imaginan a River goleando en Córdoba?
2 comentarios:
Me costó, pero lo encontré: https://twitter.com/dflatorre/status/80963320844263424
Bien ahíii
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